P.E.R.F.E.C.T.O.

La cazadora "perfecto", comúnmente conocida como "chupa de cuero", nace en 1928 en una pequeña tienda del Lower East Side de Manhattan (si, si, alli donde las limusinas de Chuck y Blair no llegan).
Tal año, Irving Schott, crea la primera cazadora de cuero con cremalleras por encargo de un motero y conviene en llamarla "Perfecto", el nombre de sus puros cubanos favoritos.
A pocos años de cumplir un siglo esta prenda resurge cual Ave Fénix para imponerse en las pasarelas.

Mitos del imaginario popular, esa es la clave; la historia del cine, primero, y la historia del rock, algo más tarde, han convertido esta prenda en la segunda piel de personajes macarras y problemáticos, que por otro lado nos robaron el corazón.

En 1954 se estrena “Salvaje”, donde Marlon Brando daba vida a Johnny, el carismático líder de un grupo de alborotadores motoristas; un año más tarde, James Dean encarnó a un “Rebelde sin causa”, ambos fueron caracterizados como motoristas enfundados en una cazadora perfecto. Podría decirse que su estreno fue el pistoletazo de salida, y de ahí a la post-modernidad del cine, ese icono sigue intacto en la retina audiovisual: Easy Rider (1969), Grease (1978), Mad Max (1979), Cry-Baby (1990), Terminator 2 (1991), Rock Star (2001)… por citar algunas de mis favoritas.

Aprovechando los patrones estéticos que ofrecía la gran pantalla, Michael Jackson en 1987 decide decirnos que es la persona más “bad” que existe en la tierra. Y como él, infinidad de personalidades del rock, el punk y el heavy metal.

Pero… ¿qué ha pasado para que la chupa vuelva a estar de moda? Quizás hemos perdido el miedo a que nos tachen de rebeldes, o quizás hemos descub

ierto que nos gusta ser malos… sea lo que sea, a m

i me encanta porque es simplemente P.E.R.F.E.C.T.A.

Una de mis favoritas, de Balmain, como no.